Te vi como el amor que jamás había tenido
eran tan lúcidos mis pensamientos
me vi contigo ya casado y con hijos
siempre fueron puros mis sentimientos.

Te escribí tantos versos llenos de amor
inspirado en un mundo que no era mío
cada verso para perfecta ocasión
al final resultó como piedra en el hastío.

Entre líneas te intentaba dibujar
en los instantes que pensaba en ti
en mis poemas te empezaba a relatar,
sentía que moría y volvía a vivir.

Ahora en cada canción recuerdo tu voz
y pensar en ti hago todos los días
es un hábito que está en mi corazón
también pienso en tus promesas fallidas.

Pensando en ti soñé cosas increíbles
primero que bebía pura miel del panal
creía que este amor era invencible
ahora el veneno de las flores del mal.

Ojalá esto no hubiera sucedido
y no es que te he dejado de querer
aun no asimilo haber perdido el nido
es el despecho de no saber perder.

Autor: El Príncipe Trovador